Las autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras anunciaron la victoria de Nasry Asfura en las elecciones presidenciales, signadas por un largo proceso de recuento y denuncias de supuestas irregularidades.

Según el dictamen del organismo electoral, Asfura se impuso con el 40,1% de los votos, superando por un estrecho margen a su principal rival, Salvador Nasralla, quien cosechó el 39,5% de los sufragios. Como sea, el oficialismo quedó relegado al tercer puesto: su candidata, Rixi Moncada, ex funcionaria de la presidenta saliente, Xiomara Castro, obtuvo el 19,19%.

El Gobierno de Estados Unidos, que había manifestado su respaldo a Asfurah, celebró la victoria del presidente electo y dijo que esperan trabajar en conjunto para frenar la inmigración ilegal.

"Esperamos trabajar con la próxima administración para avanzar en la cooperación en seguridad bilateral y regional, detener la inmigración ilegal hacia Estados Unidos y fortalecer los lazos económicos entre los dos países", dijo el secretario de Estado, Marco Rubio, en un comunicado.

Quién es "Tito" Asfura

Nasry Asfura, de 57 años, es un empresario de ascendencia palestina que se encuentra ligado al negocio de la construcción desde hace 40 años. Dio el salto a la política durante la década del '90 como funcionario de la gobernación de Tegucigalpa, la capital hondureña. Tras algunos intentos fallidos, se alnzó con la alcaldía de la capital en 2013, cargo para el que fue reelecto en 2017.

Al final de su mandato, anunció su candidatura por el Partido Nacional para las elecciones presidenciales de 2021. En dichos comicios, fue derrotado por Xiomara Castro.

Volvió a lanzar su postulación para las elecciones de este año, algo que finalmente obtuvo gracias a su victoria en las elecciones interna del partiod de marzo de este año.

Cultor de un bajo perfil, es díficil encontrar la imagen de Asfura en avisos publicitarios. Mucho más oírlo en entrevistas televisivas. Con todo, se ganó el respaldo de Estados Unidos para estos comicios, en el marco de la creciente intervención del presidente Donald Trump en la región.