La tenista Aryna Sabalenka, número 1 del mundo, dejó en claro su postura sobre el debate de la inclusión de las mujeres transgénero en su deporte. Durante una entrevista con el periodista Piers Morgan, la bielorrusa dijo que sería "injusto" enfrentarse a rivales que nacieron biológicamente como hombres.

"Es una pregunta complicada", comenzó diciendo la joven de 27 años en el programa "Uncensored" ("Sin censura") ante la consulta del presentador británico. Y continuó: "No tengo nada en contra de las personas trans, pero creo que tienen una ventaja (física) enorme sobre las mujeres, por lo que no me parece justo que tengamos que enfrentarnos a oponentes que nacieron biológicamente como hombres".

"Al final, nos pasamos toda nuestra vida entrenando para tratar de alcanzar nuestro límite físico y, si esto llega a darse, nos estaríamos enfrentando en la pista a un hombre biológico, que por definición siempre va a ser mucho más fuerte que una mujer", agregó Sabalenka.

Según las reglas actuales de la WTA, una mujer transgénero puede participar en el circuito siempre y cuando haya declarado su género como mujer por un mínimo de cuatro años, y si ha bajado sus niveles de testosterona de acuerdo al límite establecido (10 nmol/L).

La mejor jugadora del mundo en la actualidad no es la primera en manifestarse al respecto. Sin ir más lejos, Martina Navratilova, ex número 1 y una de las mejores tenistas de la historia, también se mostró en contra de esta medida años atrás, lo que le valió críticas incluso de activistas por la igualdad de género. "Estoy encantada de dirigirme a una mujer transgénero de la manera que ella lo prefiere, pero no estaría contenta de competir contra ella. No sería justo", dijo la ganadora de 18 títulos de Grand Slam, que en la década del '80 se declaró bisexual.

Las declaraciones de Sabalenka se dieron durante la presentación de un evento de exhibición que realizará junto al tenista australiano Nick Kyrgios, a quien se enfrentará en la denominada "Batalla de los Sexos", el próximo 28 de diciembre en Dubái.