Llegó el día en el que un puñado de ingleses celebró un gol con la mano. Sí, tal como el que Diego Maradona les marcó a fuego para siempre en el Mundial de México 1986, aunque en este caso fue festejado por algunos y repudiados por otros.
En la tercera fecha de la Liga de Inglaterra, Willy Boly abrió el partido para el Wolverhampton a los diez minutos del segundo tiempo con un gol con la mano. El defensor tuvo la intención de cabecearla pero la pelota le terminó pegando en el brazo derecho y entró al arco.
Si bien el Manchester City al menos tuvo la suerte de llevarse un punto (empataron 1-1), lo cierto es que no hubiese existido festejo de Boly si en Inglaterra existiera el VAR. ¿Por qué no está? Es que a principio de temporada, los dirigentes votaron en contra de su utilización.