Una nueva marcha multisectorial se llevó a cabo este miércoles en los alrededores del Congreso de la Nación, donde convergieron diversos grupos con demandas específicas. La movilización fue protagonizada principalmente por jubilados, quienes realizaron su tradicional concentración semanal, y por familiares de personas con discapacidad. 

Estos últimos se manifestaron con urgencia mientras en la Cámara de Diputados se aprobó el rechazo al veto presidencial de Javier Milei a la ley de emergencia que beneficiaría a este sector.

La manifestación, que reflejó un creciente descontento social, contó con el acompañamiento de importantes organizaciones sindicales y políticas. Entre ellas se destacaron las dos fracciones de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), lo que subraya la amplitud de la convocatoria. También se sumaron referentes y militantes del Frente de Izquierda, consolidando un espacio de protesta que aglutina diferentes vertientes de la oposición. 

El gremio de estatales ATE (Asociación Trabajadores del Estado) también estuvo presente, sumando su voz a los reclamos y evidenciando la preocupación de los trabajadores públicos ante las políticas actuales. Además de estos actores principales, se observó la participación de otros sectores sociales y organizaciones de derechos humanos, que se unieron para amplificar las voces de los afectados y presionar al poder legislativo.