La alimentación del bebé es una de las mayores fuentes de presión para las madres, después de la educación. Así lo estableció un estudio de la consultora Trendsity, que exploró factores de presión y bienestar entre las madres.
Mariela Mociulsky, CEO de la compañía, afirmó que "1 de cada 4 mamás declara haber sufrido depresión postparto, lo cual evidencia la importancia de ofrecer apoyo y opciones informadas que alivien la carga emocional".
El sondeo de alcance nacional consultó sobre aspectos de salud mental entre 300 madres de bebés menores a 9 meses y 100 padres. Del informe también se desprende que el 82% de las madres encuestadas asegura que en nuestra sociedad no está bien visto hablar de las dificultades o quejarse del cansancio.
A su vez, el estudio indica que el 73% de los papás acuerda con que uno de los momentos que más disfruta es tener la posibilidad de alimentar a su bebé y un 79% suma a este dato, que le gustaría ayudar a que de esta manera su pareja no se sienta tan presionada en la alimentación. El mismo estudio indica que el 78% de las familias que utilizan leche maternizada continúa también con la lactancia materna, lo que facilita una dinámica familiar más inclusiva.
Asimismo, el experto en salud materno-infantil, el Dr. Fernandez Sasso informó: “La lactancia es un tema especialmente recurrente en las consultas médicas, la presión de la mirada externa y la culpa ante la expectativa y lo posible”. El uso de leche maternizada en la lactancia mixta es seguro y científicamente respaldado como la mejor alternativa nutricional completa y adecuada a la leche materna.
Sin embargo, persisten mitos y prejuicios: “7 de cada 10 familias considera importante derribar mitos sobre la alimentación en la crianza”.
Un mito importante a derribar que surge es el de la leche de vaca, por ejemplo, ya que los estudios indican que no es una opción segura, ya que no está diseñada para satisfacer las necesidades nutricionales de los bebés. En cambio, la leche maternizada está específicamente formulada para este fin, cubriendo el 100% de los nutrientes esenciales. “Optar por la leche maternizada no implica riesgos y permite a las madres adaptarse a sus realidades, brindando al bebé los nutrientes necesarios sin comprometer su salud”, señaló el Dr. Fernandez Sasso.
Ambos profesionales resaltan que es muy importante contar con información certera para que cada familia pueda optar por el camino que mejor se adapte a sus necesidades y circunstancias, fomentando una experiencia de crianza gratificante.